"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja. " Rayuela
3 comentarios:
no es que el ojo se nuble, si no sólo está despertando del letargoso y dulce sueño...
qué triste es descubrir que la metáfora se rompe, y ver que el trasfondo es más penoso de lo pensado...
duele... duele... qué hacer contra eso?
Lindo y profundo como siempre, pero qué consuelo queda si la realidad, a veces, es más dura y poderosa y todo lo consume?
No rompas la metáfora, ella es simpática y se lleva bien con mucha gente...
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